El periodismo desde las RRSS. Reinventarse o morir

Closeup shot of several newspapers stacked on top of each other

Las redes sociales son las grandes protagonistas del panorama informativo. Su introducción ha beneficiado al igual que ha perjudicado a la calidad de la información a través de la desinformación. Os damos las claves para combatir las fakes news

Cuando hablamos de periodismo, lo primero que se nos viene a la mente es la imagen tradicional de un estudio de televisión o una redacción de prensa. Este panorama ha favorecido a la par que ha perjudicado a los medios de comunicación. El exceso de información, las fakes news y la desinformación son los principales culpables de la imagen negativa que han adquirido en la actualidad. 

Sin embargo, el periodismo es mucho más que artículos y piezas televisivas. El periodismo es comunicación y como ella misma, la principal vía de socialización. Va cambiando para adaptarse, al igual que las personas, a las diferentes etapas de la historia. 

Atrás quedaron los extensos tabloides para das paso a los nuevos formatos tecnológicos en los que las redes sociales son las grandes estrellas. Twitter, Instagram y Facebook son ahora las emperatrices informativas. TikTok es un simple conquistador con ganas de acaparar todo el panorama. Y LinkedIn, el gran soberano, desconocido para el pueblo, pero con gran poder en el ámbito empresarial. 

Aunque a los padres del periodismo les cueste reconocer su importancia, a los profesionales benjamines -como es mi caso- son nuestro segundo hogar. Lo mismo navegas en ellos para informarte de la última ley aprobada en el Congreso de los Diputados que para estar al tanto de los trending topics que acapararán todo el protagonismo en las conversaciones con amigos. Nadie quiere caer en la espiral del silencio y para ello, las redes son las grandes maestras. 

Al igual que han introducido grandes avances, también han perjudicado al periodismo de calidad. El exceso de información provoca desinformación. Tener tanto y al alcance genera confusión, aunque el error se corrige con investigación. No te queden es el primer tweet, sigue indagando. 

Desde mi experiencia profesional, os proporciono varias recomendaciones para luchar contra las falsas noticias: no caigas en los clicksbait, consulta en perfiles con cierta reputación, comprueba el contenido, no te dejes llevar por la emoción de la especulación, examina las imágenes y revisa los datos estadísticos. 

Las fakes news son más fáciles de detectar que dé créeselas. Pero solo tienes que dejarte guiar por el olfato periodístico. Al fin y al cabo, todos somos comunicadores de lo que realmente nos interesa.